lunes, 13 de enero de 2014

¿DESPEDIMOS A LA NAVIDAD?

Volvemos a la realidad habitual, la alegría se desvanece, vuelve la oscuridad a las calles, amor, paz y comprensión quedan archivados hasta el invierno próximo y volvemos a ser lo que se supone que debemos ser, no lo que nos gusta ser.

Escondemos nuevamente nuestra inocencia y hacemos callar al niño que somos por dentro. Dejamos de desear en voz alta felicidad a nuestros vecinos; socialmente es incorrecto hacerlo fuera de fechas.

Por eso algunos aprovechamos estos días para vivir sin disimular. Gritamos al mundo nuestros de deseos de felicidad, iluminamos todos los rincones de la casa y expandimos libremente nuestro amor. Reímos como los niños que somos. Sabemos con seguridad absoluta que el mundo es mejor de lo que nos dicen porque lo mueve la magia, la bondad y la alegría.

Dicen que la Navidad es una fantasía y lo demás la realidad cotidiana, pero hay quien piensa que debe ser al revés: que la Navidad es la realidad profunda de la vida todos los días y la “No Navidad” es una ficción que, por alguna razón, hemos elegido creer.

Dijo aquel poeta*: "la barca del amor, se estrelló contra la vida cotidiana".

Pues yo pienso seguir navegando.


* Vladimir Mayakovski

viernes, 29 de noviembre de 2013

EL NUEVO AYUDANTE


Hoy 21 de Noviembre, ha venido a Koré para su terapia semanal Bea, una embarazada de 39 semanas, ya casi en la recta final. Pronto conoceremos personalmente a la pequeña Cristina. Se le practica osteopatía craneosacral, reflexología podal o la técnica que en ese momento consideramos más oportuna.

Nuestro ayudante terapéutico especial ha entrado por sorpresa en la cabina y ha colaborado de forma espontánea en la terapia.

Nuestro ayudante especial es un perrito de tipo Yorkshire de nueve meses, muy manso y simpático llamado “Harpo” que acostumbra a echarnos una mano sobre todo en los tratamientos infantiles.

Suele quedarse a mi lado tranquilo y muy atento durante las sesiones en las que participa. Casi nunca emprende acciones por su cuenta, a parte de jugar con los niños para darles confianza.

Pero esta vez ha insistido mucho en subirse a la camilla, la madre le ha dado permiso y, con nuestra supervisión, se ha acomodado entre sus pies.

Harpo ha conectado inmediatamente con ella y especialmente con Cristina y de una manera muy respetuosa, le ha hecho mimos y han estado jugando, porque la niña se movía en respuesta a sus estímulos y él seguía sus movimientos.

En estas fases del embarazo procuramos que asistan a la terapia las personas que acompañarán en la vida al recién nacido.

Hoy, además del colaborador mencionado, ha estado presente la madrina de la niña que nos ha sorprendido ayudando a practicar un poco de reflexología a la madre. Ha sido un hecho extraordinario, porque es una persona a la que siempre le ha dado aversión tocar los pies de alguien.

Quiero dar las gracias a todos los participantes por esta mágica sesión que hemos compartido.

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Debo anunciar que, en la fecha de publicación de esta entrada, Cristina ya ha hecho su entrada triunfal en nuestro mundo. Todo ha ido muy bien a pesar de que se preveía la necesidad de practicar una cesárea, al final la niña ha nacido por la vía normal y sin problemas.

¡Bienvenida!

lunes, 11 de noviembre de 2013

viernes, 11 de octubre de 2013

CON LOS DELFINES


Esta fue mi primera experiencia con los delfines y la he querido compartir con vosotros.

En el año 2003 tuve la oportunidad de asistir en el Upledger Institute de Palm Beach (Florida, USA) a un curso de Osteopatía Craneal organizado por la sede española de la institución.

Entre otras personas conocí al profesor John Upledger, creador de la terapia craneosacral y el iniciador de todo esto. Todo un personaje mundial que resultó ser una persona muy sensible y natural con una sabiduría extraordinaria de la cual tuvimos la oportunidad de beneficiarnos.
Realmente fueron unos días intensos de aprendizaje, complicidades, emociones y amistad.
Una vez finalizado este encuentro, algunos de nosotros seguimos la aventura en Freeport (Bahamas), donde nos encontramos con Chas y Kat, su mujer. Ambos fueron nuestros maestros en la osteopatía craneal bioacuática, ya que nos instruyeron en el uso del diálogo no verbal para conectar con los delfines desde nuestra esencia más profunda.
Iniciamos las sesiones preparatorias en el agua, tanto en el mar como en piscina. Durante las terapias en cada uno de nosotros afloraron muchas capacidades y emociones escondidas.
Por fin llegó el día de visitar a los ángeles del mar, los delfines.
Por mucho que lo intente no se explicar con palabras lo que sucedió esos días, pero al igual que yo, todos nos transformamos, hubo algo mágico...
Salimos con el barco hasta una zona de mar abierto, allí saltamos al agua y en cuestión de minutos empezó a llegar un grupo de delfines, por una parte estaba llena de felicidad pero por otra muerta de miedo; el subconsciente empezó a hacer sus trastadas.
Mientras estaba observando a mis compañeros, empecé a conectar con mi niña interior, ella irradiaba alegría, seguridad y confianza y quería compartir conmigo estas sensaciones.
Intenté poner la mente en blanco pero fue peor, el miedo me invadió por completo, ella me decía: “confía, confía, confía...” Cuando al fin integré en mi interior la palabra “confía” todo cambió.
Empecé a entender el diálogo no verbal, el mismo que se usa para hablar con los bebés, con el reino animal y con cualquier ser con el que no sea posible la comunicación mediante palabras.
Mientras nadaba, ya más tranquila, uno de los delfines se aproximo a mi lado, me sorprendió porque no le vi llegar, se puso a nadar conmigo, adaptándose a mi ritmo y velocidad.

Se dejó tocar su piel suave y resbaladiza, le cogí de la aleta y empezamos a nadar bajo el agua, hubo un instante que me dio la sensación que me iba a ahogar, me faltaba oxígeno, pero empujada por el delfín subimos a la superficie para coger más aire y seguir jugando bajo las aguas del Atlántico, su mundo. Perdí la noción del tiempo, sentí la sensación de que muchos caminos se abrían en mi interior.
Cuando lo creí conveniente le dije a mi amigo del mar que había otros compañeros míos que también necesitaban su ayuda, me despedí y le di las gracias por la experiencia tan maravillosa y que habíamos compartido. Se marchó de mi lado y me quedé nadando sola, con una sensación de respeto, confianza y amor total.

Antes de irse me dejó unas palabras que yo sentí en mi mente “confía en ti y en tu percepción personal de las cosas. No te preocupes, siempre estaremos en contacto de alguna forma, ya que la energía del Universo no tiene fronteras”.

Chas y Kat, cuando regresamos al puerto, me comentaron que había recibido una terapia de sanación en vivo y en directo de una hembra embarazada.
Les sorprendió mucho ya que las hembras en este estado no se acercan nunca a los humanos, se muestran distantes, ariscas y desconfiadas.

Lo que me ha aportado esta bella delfina es facilitar mi trabajo con bebes y niños, tener capacidad de entendimiento con los animales, confiar en mi intuición, no olvidar nunca a mi pequeña voz interior y encauzar correctamente la energía.

Los delfines son seres inteligentes, muy sensibles y amistosos que viven libres en su mundo marino y a los que no siempre hemos sabido tratar con el respeto que merecen.

Gracias por las enseñanzas que nos aportáis.


jueves, 7 de febrero de 2013

NIKI, EL PERRO TERAPÉUTICO-TERAPEUTA

Todo empezó hace 12 años cuando vinieron a Koré dos hermanitos gemelos que habían sido diagnosticados como autistas.

Casualmente Niki estaba allí porqué luego teníamos que llevarlo a la peluquería.

Al oírlos llorar durante la sesión el perro se presentó en la cabina (cosa que no hacía jamás) y con su presencia consiguió romper los recelos iniciales de los niños creándose una bonita relación entre los tres.

En ese momento entendimos que Niki formaba parte de nuestro equipo de terapeutas.

Desde entonces y hasta sus últimos días nos ha estado ayudando y enseñando, dando cariño a todos los niños que lo necesitaban.

Nos hizo entender que donde los humanos no llegamos los animales saben llegar de una forma sutil, divertida y amorosa. Que los seres no humanos también poseen alma y sensibilidad y que hay muchas formas para establecer diálogos y facilitar caminos.

No se si llamarle perro terapéutico o terapeuta, porque no se si era solo su presencia y compañía la que nos ayudaba o, a su manera, intervenía intencionadamente en las terapias.

En cualquier caso, gracias por todo amigo.

miércoles, 3 de octubre de 2012

Vuelta al Cole



Los niños también padecen estrés. La entrada del otoño coincide para ellos con la vuelta al colegio, inicio de guardería, etc.

El contacto repentino con todos los otros niños, sumado al estrés por los cambios, facilita la caída de defensas y la propensión a infecciones víricas, normalmente leves, en forma de resfriados (tos, mucosidad, dolor de garganta, etc.)

Para fortalecer el sistema inmunitario os recomendamos:

    Echinacea: Estimula las defensas. 1 toma antes de ir al colegio. La encontrareis en Parafarmacias o Herboristerías. Para niños, mejor en gotas.

    Infusión de tomillo con una cucharadita de miel. Es antivírico, refuerza los bronquios y limpia la garganta.

Aconsejamos la aplicación de unas sesiones de Reflexología Podal antes de comenzar el nuevo curso. Previenen, equilibran y aumentan las defensas.

jueves, 5 de julio de 2012

LA TERAPIA CRÁNEO-SACRAL Y SU APLICACIÓN EN EL PARTO


LA TERAPIA CRÁNEO-SACRAL Y SU APLICACIÓN EN EL PARTO.
La Terapia Sacro-Craneal es un tratamiento muy preciso y suave. Trabaja sobre lo que llamamos Sistema Cráneo-sacral que está compuesto de unas membranas que envuelven el cerebro y la medula espinal, dentro de las cuales está el líquido cefalorraquídeo, cuya circulación provoca unas pulsaciones rítmicas, de unos 8 ciclos por segundo, que pueden ser detectadas por una mano entrenada.
A partir de 1970, el Dr. John Upledger desarrolló las técnicas pera evaluar y tratar estas membranas y todo el sistema del tubo dural, poniendo en marcha al “medico interno”, es decir, a los mecanismos naturales de autocuración a fin de que el propio organismo pueda corregir las disfunciones que puedan presentarse.
Como directora del centro de terapias manuales KORÉ empecé hace algunos años a sentir interés por esta terapia. Tras realizar varios cursos de formación con el Dr. Upledger, decidimos aplicar esta técnica a nuestros pacientes. Pronto nos dimos cuenta que con la Terapia Cráneo-sacral, que inicialmente utilizamos como complementaria, conseguíamos muy buenos resultados y ahora es uno de nuestros tratamientos básicos.
Uno de los objetivos específicos de esta terapia y donde hemos obtenido unos resultados más tangibles es en su aplicación durante toda la fase perinatal (antes, durante y después del parto). Lo que sigue está basado en experiencias y observaciones propias, obtenidas en el transcurso de los tratamientos realizados en nuestro centro.
ANTES DEL PARTO
En su aplicación anterior al nacimiento se persigue, en primer lugar, equilibrar el organismo materno y prepararlo para soportar el embarazo y afrontar el parto en las mejores condiciones posibles.
En segundo lugar se procura armonizar la relación madre-hijo, de modo que ambos aprendan a sentirse y a dialogar.
Días antes del acontecimiento, la terapia puede ayudar al bebé a adoptar espontáneamente una posición correcta sin moverlo físicamente desde el exterior.
DURANTE EL PARTO
El terapeuta puede intervenir en el mismo momento del parto, ajustando “in situ” las interacciones de los participantes.
Esta intervención tendrá lugar durante un parto de tipo natural, con la madre en una posición natural que evite tener que tirar de la cabeza del niño y facilite sus movimientos espontáneos.
El niño atraviesa, durante esta fase, instantes que pueden ser muy duros para él y que le provocan un estrés considerable ya que todo su organismo es expuesto a una prueba límite.
Por eso, abreviar y facilitar este paso, ahorra traumas físicos o síquicos posteriores.
Quizá no esté de más aclarar que el parto natural no significa prescindir del personal sanitario cualificado ni de las prestaciones médicas para el caso de surgir complicaciones inesperadas. De hecho muchas matronas conocen y practican esta técnica.
DESPUÉS DEL PARTO
Acostumbra a practicarse una sesión alrededor de una semana después. El niño suele revivir el momento del parto pero lo hace sin los traumas que ocurrieron durante el mismo. Revive una entrada a la vida perfecta y limpia.
Durante este proceso se requiere la presencia e implicación de los padres y, en ocasiones, de los familiares más cercanos, pues el niño reclamará su contacto, que le proporciona seguridad y confianza.
En este momento se corrigen las posibles lesiones que puedan haber originado cualquier tirón muscular o cualquier otro esfuerzo excesivo que se hubiera producido especialmente a nivel del Sistema Nervioso. Los nervios Vago y Glosofaríngeo suelen  ser los más afectados, provocando en el recién nacido disfunciones digestivas y excretoras, dificultades para succionar, cefaleas etc.
Algunos tratamientos hospitalarios que en su momento pueden ser necesarios, tienden a provocar posteriormente traumas emocionales.
La cesárea hace que la madre y el bebé pierdan el contacto en un momento muy importante. Éste tiene la sensación de haber aparecido “de repente” y ello puede conllevar problemas muy diversos, desde asma hasta hiperactividad.
El tratamiento con incubadora, al separar al niño de la madre, genera en éste sentimientos de inseguridad y miedo a quedarse solo.
El hecho de programar el parto, es decir, adelantarlo o retrasarlo a conveniencia de la agenda de los padres o del hospital, hace que el nacimiento no se efectúe “en su momento” y le da al niño sensación de peligro y hace que nazca angustiado y estresado.
Todos los problemas producidos durante el parto suelen provocar diferentes perturbaciones físicas o ser causa de determinadas “manías” o fobias (miedo a la oscuridad, al agua, etc.) que perduran a lo largo de la vida sin que se sospeche su origen, afectándola en mayor o menor medida.
Según nuestra experiencia, cuanto más tiempo transcurre entre el momento del trauma y la aplicación de la terapia, mayor número de sesiones son necesarias porque la sensación queda “enquistada” cada día más profundamente en la memoria. Por eso los tratamientos en adultos, aunque igual de eficaces, son más largos que los de los bebés, que pueden funcionar en 2-4 sesiones.
Isabel Mulero, Zoraida Linares

Articulo publicado en la revista Nueva Estética en 2005
www.kore.es